Hoy gobiernos y banqueros
han trucado su balanza,
la han llenado de dinero,
ya no nos queda esperanza.
Sigue ciega cuál estatua,
nadie le quitó la venda.
Ciega aún sigue siendo bella
pero mala cuál quimera.
Themis se quitó la toga,
ahora se viste de cuero,
sirve a Franco, al rey y al clero
y a los oprimidos ahoga.
Pero hay una señorita
que cambiará la balanza,
desde nuestro interior grita
y su nombre es Venganza.