viernes, 31 de mayo de 2013

ESPERANDO AL EXORCISTA


El exorcista no llega
y mis demonios me la juegan
pintando murales de días
en los que aún asolaba la pena.

Pero vuelvo a levantarme
y afeito los días a contrapelo
y aunque de los cortes brote sangre
me recuerdo que vivir es solo un juego.

Por fin dejan de sangrar las yagas
que las esposas hacían chillar,
por fin las cadenas vuelan
y mi cuello conseguí liberar.

Ya no tengo miedo al verdugo
que con su hacha me dará final
y vuelven a entrar en mi vida
razones por las que luchar.

Y si vuelven a tirarme en la fosa
sin problema me podré levantar.
Pero antes de creerme todo esto
el exorcista habrá de llegar.

2 comentarios:

  1. Tienen rabia tus letras, es opresión, una opresión metafórica por las cadenas pero opresión al fin y al cabo.

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  2. ¡Kapy! Por aquí me tienes de nuevo. Es una alegría volver a leer otra de tus poesías. Ahora que he cogido la costumbre de estar pendiente de las novedades que indica mi blogroll, sabré siempre cuándo publicas y te comentaré más a menudo.

    Desde que dejaste tuenti, la verdad, es que me he acordado de ti en diversas ocasiones por lo que me agrada retomar el contacto.

    Respecto a tu poesía, decirte que, en ocasiones, es cierto que nos vendría bien algo más fuerte que un exorcista para dejar atrás todos nuestros demonios.

    Un abrazo,

    Abel Jara Romero

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